En esta Región, se reconocen algunos elementos de identidad diferenciados por provincia, que es importante relevar: Palena, que constituye identidad cordillerana, pionera, binacional y patagónica, asociada a tradiciones productivas agrícola-ganaderas, que actualmente se cruzan con la pesca y el turismo en la actualidad; Chiloé, territorio con identidades productivas evidentes y prácticas populares y artísticas “anónimas”, determinadas por la actividad turística; Osorno, que expone una identidad industrial, con un rol preponderante del folclor en el diario vivir, identidad orgullosa del paisaje “privilegiado” y de la pluriculturalidad; Llanquihue, con una identidad sustentada en la fisionomía del territorio, vinculado al bordemar y al Alerce.